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Somoteños sufren racionamiento de agua

Doña Esperanza Martínez López, de 63 años, tiene que levantarse todos los días a las 2:30 de la madrugada para poder agarrar agua y almacenar en barriles para ocuparla en los quehacer de su hogar, porque en el barrio de Las Minitas, donde vive, al sur de la ciudad de Somoto.


Colaborador Joel Castillo
10-Enero-2017
Madriz-Nicaragua
Doña Esperanza Martínez López, de 63 años, tiene que levantarse todos los días a las 2:30 de la madrugada para poder agarrar agua y almacenar en barriles para ocuparla en los quehacer de su hogar, porque en el barrio de Las Minitas, donde vive, al sur de la ciudad de Somoto, el servicio solo llega un par de horas y después pasa todo el día sin ese vital líquido.

Al igual que doña Esperanza, decenas de familias de sectores como el 9, 11, 16, sector de Los Maestros, 18 y 20, entre otros, enfrentan, desde hace unos siete años, el mismo problema de la escasez diario del agua potable.

Las autoridades de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados Sanitarios (ENACAL) en Madriz realizan racionamiento con el argumento de que tienen que hacer cortes para hacer llegar el servicio a otros sectores urbanos de la ciudad.

Los más afectados son aquellos pobladores que viven en sectores alejados de los tanques de almacenamientos y distribución de agua de Enacal, y los que viven en zonas altas.

Pero tampoco se salvan los propietarios de restaurantes, hoteles, comedores y de otros comercios o negocios ubicados en el centro de la ciudad, quienes han tenido que invertir en la construcción de pilas o la compra de tanques de almacenamiento.
Comunidades de Madriz, también sufren escases del vital líquido

Además del área urbana de la ciudad de Somoto, muchas comunidades como Cacaulí y Santa Teresa, y otras como La Esperanza, en el municipio de Yalagüina, las familias enfrentan cada año, en época de verano, el racionamiento del servicio de agua potable y tienen que abastecerse de pipas o cisternas que son enviadas por Enacal.

Solo en la comunidad de La Esperanza, en Yalagüina, unas 3,000 familias tienen que ser abastecidas de agua con cisternas porque las aguas de los pozos tienden a descender para estas épocas.

También unas 314 familias de la comunidad de Los Encuentros, en el municipio de Yalagüina, enfrentan escases de agua de consumo, porque las fuentes subterráneas tienden a descender después del periodo lluvioso.

El año pasado el Ingeniero Bryan Rodríguez, delegado de Enacal en Madriz, dijo a un medio local que en el caso de Somoto se sectoriza el servicio, para que toda la población pueda obtener un poco de agua.

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