Colaborador
Joel Castillo
A doña Ester Flores Lazo, de 63 años, ya comienza a agotarla las levantadas diarias a la 1:00 o 3:00 de la madrugada para agarrar agua potable en uno de los sectores de Somoto.
También doña Zoila Herrera, propietaria del comedor ?Mi Esperanza?, tiene que despertarse a esa misma hora para llenar recipientes con el que prepara los alimentos que vende.
Esta misma situación la viven desde hace varios años los habitantes de la mayoría de los 27 sectores de la ciudad de Somoto, donde las autoridades de Enacal, han incrementado este año las horas de racionamiento.
Se desconoce según los afectados las causas del racionamiento debido a que en las últimas semanas ha estado lloviendo mucho.
El Ingeniero Bryan Rodríguez delegado departamental de Enacal en Madriz, aun no da una versión oficial acerca de los racionamientos que se están incrementando en la ciudad de Somoto.
Este mismo problema lo sufren también habitantes de muchas comunidades rurales del municipio de Somoto.
Aun hay zonas como Santa Isabel donde siguen llegando las pipas o cisternas de los bomberos o alcaldía y camionetas privadas, estas últimas venden el barril de agua.
