Cada año cientos de nicaragüenses emigran a España en busca de una mejor calidad de vida, sin embargo, no todos logran cumplir sus objetivos y algunos encuentran la muerte en ese país europeo.

Debido a que no todos logran legalizar su estadía, sus muertes se convierten en un dilema para sus paisanos, quienes en medio de la tragedia, se solidarizan y buscan resolver el destino de sus restos mortales para concretar la repatriación.

Tanto en Nicaragua como en España, se han promovido campañas para lograr recaudar el dinero suficiente para repatriar los cuerpos y darles sepultura en su tierra natal. Yessenia Herrera Briones es una nicaragüense que reside en Madrid, España, y a través de su página de Facebook: Nicaragua Solidaria en España, ha desarrollado eventos para apoyar a las familias que lo necesiten.

Aunque sea duro, morir es inevitable por lo que un seguro ayudaría a familiares a cubrir los costos de repatriación. Foto: Cortesía

"La mayoría de personas venimos a este país con metas de hacernos una casa, de sacar adelante a nuestros hijos, a nuestra familia, pero desgraciadamente la muerte le ha tocado solo a personas de escasos recursos, para poder ayudar a las personas, yo primero investigo si tiene dinero o de donde sacar fondos para repatriar el cuerpo, si esta persona es de escasos recurso, yo lo publico en la página y la ayuda empieza", manifestó Yessenia Herrera Briones.

En este sentido, Yessenia Herrera asegura que tener un seguro es muy importante, pues considera que además de causar dolor y sufrimiento a las familias con las muertes inesperadas, también se les deja una deuda. "La repatriación o incineración de un cuerpo cuesta mucho dinero", aseveró la nicaragüense.

Seguros para estar preparados

La Agente de Seguro Jamileth Chavarría, quien también es nicaragüense, confirmó que los nicas migrantes no cuentan con seguros de deceso, lo cual evitaría que las familias aún en medio del dolor, se enfrenten a la incertidumbre de que hacer para sus honras fúnebres.

"Eso se llama seguro de previsión social, eso quiere decir que tenemos cubierta esa parte importante de nuestra vida porque si hay algo que tenemos seguro es que vamos a morir, no sabemos cuando pero que no nos tome por sorpresa. Animarles porque no tenemos ese cultura de pagarnos un seguro", explicó Chavarría, quien labora para Seguros La Purísima.

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Marta Alicia González Duarte fue la última nicaragüense es ser repatriada. Foto: Cortesía

"El seguro de deceso y repatriación garantiza todo lo que necesitas a la hora del deceso: el ataúd, el maquillaje, el servicio de tanatorio, la refrigeración, todo. En cuanto a la repatriación, tiene incluido un viaje de ida y vuelta para la persona que acompaña al fallecido y está asegurado el presupuesto para la estancia en el país de origen, y se cubren entre 400 y 600 euros para los gastos fúnebres en el país de origen", aclaró la agente de viajes.

Según Chavarría, los precios de dichos seguros son accesibles y se pueden pagar de forma mensual, trimestral o anual, y pueden usarse después de seis meses de haberse sido contratados, debido a una condición llamada "carencia". Además con ello, el migrante tiene una demostración del arraigo que le beneficia en el proceso de legalización. "Debemos ser responsables y no dejarle un problema a la gente en este país. Si la gente quiere a los suyos, que no les haga pasar un trago amargo por no tener un seguro", manifestó Chavarría.

Es una necesidad

Noticias ABC consultó a dos nicaragüenses radicadas en España, quienes cuentan con seguros de deceso y consideran que todo emigrante debe estar preparado para esa posibilidad.

"Oportunidad sí y necesidad la he visto mucho, entonces es muy importante que nos animemos a tener el seguro. He visto muchas veces que debemos cooperar para ayudar a una persona a repatriar y es muy difícil, a veces la gente no coopera, hacemos actividades y no participan, y luego piden mucho detalle, quieren que cada céntimo que la persona dona se les dé una información, que es muy importante pero también lleva un retraso a la repatriación", narró Desire Blandón Rocha, originaria de Managua, quien tiene 13 años de vivir en España.

El dolor aumenta con la angustia cuando no se tienen recursos para repatriar el cuerpo. Foto: Joel Castillo/Radio ABC Stereo

"Por mi cuenta, he decidido comprar un seguro de vida y uno de deceso, porque pase lo que pase te da la seguridad de que el cuerpo de tu ser querido sea bien tratado y sea depositado donde quiera que sea, porque sino corres el riesgo de verte en una necesidad que se presenta de cualquier manera y en cualquier momento y no tienes ni los medios ni la forma que tu ser querido, con quien has compartido toda la vida, no llegue a descansar como tú quieres", compartió doña Deborah, quien se trasladó a España hace casi 40 años desde su natal León.

Recopilaciones periodísticas del norte de Nicaragua, registran en los últimos tres años la muerte de 22 nicaragüenses, todos originarios de los departamentos de Estelí, Madriz y Nueva Segovia. La última campaña se hizo para repatriar el cuerpo de Marta Alicia González Duarte, originaria de Santa María, Nueva Segovia, quien falleció en España el pasado once de marzo después de sufrir un infarto que la dejó internada en un hospital de Madrid.