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Cuero y calzado en el sótano de los negocios

Las talabarterías tampoco se escapan de los daños económicos. Ventas bajas como nunca antes se había visto

Fernando García manifestó que esta es la situación de ventas más difícil que ha vivido. Foto: Roberto Mora/Radio ABC Stereo
Fernando García manifestó que esta es la situación de ventas más difícil que ha vivido. Foto: Roberto Mora/Radio ABC Stereo

Periodista Roberto Mora Cárcamo
6-Mayo-2020
Estelí-Nicaragua

La zona norte se distingue por las talabarterías, donde a muchos habitantes de cada municipio les encanta usar productos de gran calidad hechos de cuero.

Las monturas, las billeteras, las botas, fajas y hasta las coyundas o azotes han venido evolucionando en nuevas y mejores presentaciones que han sido del agrado de los productores o campesinos.

El talabartero esteliano Fernando García afirmó que en los 45 años que tiene de estar en esta actividad, nunca había enfrentado momentos tan difíciles como los actuales, producto de la pandemia que vino agravar la situación económica.

"La gente quisiera comprar pero la verdad de las cosas es que no hay dinero para resolver los problemas que tienen las personas que son campesinas, que tienen que resolver el problema de la montura, la albarda, la cabezada, la pechera, el gamarrón, etcétera, entonces lo que están haciendo es que priorizar la parte de la comida que es lo más primordial", manifestó García.

Por su parte, José Gutiérrez, del negocio Botas y Fajas Chepito, informó que desde hace mucho tiempo ofrece sus servicios en otros puntos como en Multicentro Estelí y comentó a Noticias ABC que las ventas han sido muy bajas, pero de repente sus clientes llegan por alguna faja, billetera o una gorra, lo cual les ayuda a no reflejar en cero sus ingresos.

José Gutiérrez no pierde las esperanzas de seguir vendiendo. Foto: Roberto Mora/Radio ABC Stereo

Estas personas que se encargan de ofrecer productos de calidad de cuero, sostienen que no pierden las esperanzas y por eso mantienen su lucha diaria para llevar el pan de cada día a sus hogares.

"Lo bueno en este negocio es cuando mantenés a tus clientes, te buscan, de repente aparece un cliente y te dice que viene a traer una billetera, una faja, pero que han estado malísimas han estado malísimas (las ventas), prácticamente la gente cerrando negocios cada día. La idea es seguir luchando, este es el punto de trabajo para mi familia, donde yo llevo la comida, le doy trabajo a otro pero con esta situación a todititos nos ha venido a afectar", expresó Gutiérrez. 


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