Una encuesta aplicada por el organismo no gubernamental UNICEF Nicaragua (de la Organización de las Naciones Unidas) revela que el 59.56% de los adolescentes y jóvenes de Nicaragua considera que sus comunidades no están completamente preparadas para lidiar con el COVID-19 y señalaron que es importante tomar medidas desde el ámbito comunitario para evitar la propagación del virus.
Estos datos fueron recopilados a través de dos encuestas realizadas por UNICEF Nicaragua, con el objetivo de obtener información sobre actitudes y prácticas de Adolescentes y Jóvenes frente al COVID-19, en la que participaron un poco más de mil personas.
La primera encuesta estuvo enfocada en conocer la percepción del riesgo de jóvenes y adolescentes sobre COVID-19 y la segunda profundizó en conocer su comportamiento emocional frente a la pandemia.
Los encuestados están en rango de edad entre los 18 y 24 años. Se obtuvieron respuestas de 16 departamentos del país: Managua, Estelí, Rivas, Masaya, RACCS, RACCN, Carazo, Matagalpa, Boaco, Nueva Segovia, León, Chinandega, Granada, Madriz, Jinotega y Chontales.
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Referente a la percepción del riesgo, el 26 por ciento de las personas encuestadas no se siente en riesgo de contraer la enfermedad, sin embargo, la mayoría de las y los jóvenes conocen qué es la enfermedad, cómo se transmite y las medidas de prevención.
Por otro lado, señalan que en el ámbito que no han obtenido información es sobre el protocolo que deben poner en práctica si contraen la enfermedad, y los riesgos y complicaciones que puede tener a largo plazo el contagiarse de COVID-19.
La mayoría, el 44 por ciento expresa sentirse preocupado y ansioso por cómo ha incidido la enfermedad en su rutina personal y familiar, lo cual también está asociado a que el 22 por ciento señaló que desde que inició la emergencia, provocada por el COVID-19, han incrementado los conflictos en la familia.
Por ejemplo, el 18 por ciento de jóvenes y adolescentes expresó que, ahora que deben permanecer más tiempo en casa por el coronavirus, han aumentado los conflictos con su mamá, papá o cuidador.