Las ostias consagradas que forman parte del culto central de la iglesia católica estaban tiradas en el piso del templo del municipio de Wiwillí, departamento de Nueva Segovia, donde la madrugada de este jueves se introdujeron unos antisociales a profanar.
"Seres humanos sin escrúpulos han profanado el Santuario Diocesano Parroquial, Nuestra Señora de Fátima en Wiwillí, Nueva Segovia", escribió en sus redes sociales el sacerdote Pastor Rodríguez de la iglesia San Francisco de Asís de Estelí, haciendo la denuncia.
El párroco del Santuario Diocesano, Iván Centeno, informó que posiblemente en horas de la madrugada unos sujetos hasta el momento desconocidos se introdujeron al templo para cometer la fechoría. No descarta la intención de profanar el templo, ya que la introducción de los antisociales se dio este jueves cuando la iglesia celebra la fiesta de Corpus Christi, que se refiere al reconocimiento de la presencia de Jesucristo en las dos especies: del pan y el vino.
Pero también los sujetos rompieron el sagrario y tiraron las ostias consagradas al piso. Los sujetos rompieron dos alcancías y se introdujeron en el área donde están durmiendo unos obreros, de donde se robaron un dinero que ellos tenían.
El padre Iván Centeno comentó a Noticias ABC que el lunes pasado unos desconocidos también profanaron el templo del municipio de Jalapa, donde quemaron unas cosas en el sagrario y se defecaron en un área del templo la Inmaculada Concepción.
El sacerdote informó que la denuncia ante la policía no es una opción, debido a que la actitud de la policía ha sido hostil y de menosprecio hacia los representantes de la iglesia en esa zona. Pero dijo que la Diócesis realizará un acto de desagravio para pedir al Señor que tenga piedad y perdone esta ofensa.
La profanación del templo ocurre después de que el sacerdote recibió amenazas. El párroco del Santuario Diocesano Nuestra Señora de Fátima, del municipio de Wiwillí, denunció que recibió amenazas después de haber hecho un llamado a los feligreses a que tengan mucho cuidado cuando tengan que mandar a sus niños a la escuela.
Le mandaron a decir que tuviera cuidado que ya saben que camina solo en una moto en las comunidades y que él no es un ministro de educación. Ese fue el mensaje que le habrían enviado al sacerdote Iván Centeno por medio de otra persona que llegó hasta su iglesia, después de que el religioso volviera a insistir con sus feligreses que se cuiden porque el Covid-19 podría contagiar a cualquiera y los instó a tomar medidas de prevención.
El sacerdote recordó que las autoridades no han brindado información sobre el avance de esta enfermedad en la zona, pero muchos afirman que ya hay contagios en esa localidad. Así mismo expresó las dichas amenazas ya son del conocimiento de organismos de derechos humanos y de las autoridades de la Diócesis de Estelí, encabezadas por monseñor Juan Abelardo Mata.
