Heydi del Carmen Pérez Gutiérrez, es originaria de la ciudad de Estelí, es madre de tres niños, en edades de 9 años, 3 años y 9 meses. Ella reside en San José, Costa Rica desde hace más de 10 años, lugar donde trabaja como asistente del hogar.
Ella es el único sostén de sus hijos pero entre viaje en ruta o buseta como le llaman en el país del sur se infectó del nuevo coronavirus SARS-CoV-2, justo en la semana mundial de la lactancia materna. "Sentía un fuerte dolor de cabeza, un frío, no me quería levantar de la cama, ya empezaban a arder los ojos muy fuertes, no los quería abrir", recuerda.
Los primeros días y horas para ella fueron desesperantes, no solo por el dolor de cabeza y escalofríos provocados por la fiebre, sino porque pensaba que infectaría al resto de sus hijos, incluyendo a la más pequeña: Valentina de 9 meses, quien todavía depende de la lecha materna.
La esteliana habita en San José, Costa Rica, con sus tres niños. Foto: Famnuel Úbeda/Radio ABC Stereo"Cuando recibí la noticia de que era un caso positivo, lo primero que se me vino fue la bebé porque pensé que se lo había pasado con la leche materna pero no fue así gracias a Dios", cuenta esta madre nicaragüense.
Heydi estaba en un país ajeno, donde las oportunidades de recuperación para un paciente migrante y desconocido son más difíciles, sin embargo, cree que Dios puso en su camino a médicos y gente de bendición para saber enfrentar esta realidad del Covid-19.
Es gente que siempre la estuvo orientando por teléfono y mensajes de textos sobre la necesidad de mantener la lactancia para su bebé, ya que esto no solo permitiría alimentarla, sino también desarrollar defensas inmunológicas de manera natural.
"Me llamaron, le pregunté al doctor que si la leche materna no le afectaba a la bebé, me dijo que no, que bien le podía seguir dando leche materna, que la enfermedad no le hacía efecto y en realidad es muy dura esta situación que hemos estado viviendo", asegura Heydi.
Hoy han pasado 8 días desde que esta madre nicaragüense se mantiene bajo resguardo en casa y según ella hasta ahora sus hijos se muestran sanos y sin ninguna sintomatología asociada a Covid-19, razón por la que agradece a Dios por mantenerla con vida y bajo recuperación, tiempo donde ha aprendido no solo a manifestar y expresar más su amor, sino también a mantener sana y fuerte a su hija más pequeña, pero sin descuidar al resto.
Ha sido una buena lección, pues a las mujeres por dar a luz o amantando que se infecten con Covid-19 las insta a no tener miedo, puesto que la leche materna tiene numerosos beneficios que superan ampliamente los riesgos de transmisión y enfermedad asociados a la enfermedad. "Bendito sea mi Dios, yo ya me siento mejor", manifiesta.
La leche materna es fundamental para el desarrollo de los niños. Foto: Famnuel Úbeda/Radio ABC StereoLa experiencia de Heydi como madre no solo pasa a ser una teoría, sino una experiencia probada de estudios realizados por diferentes organismos de salud, incluida la Organización Mundial de la Salud (OMS) de la importancia que tiene la leche materna en la vida de la niñez.
La doctora Dea Hidalgo, ginecóloga de Estelí, afirma que no hay estudios comprobados que indiquen que el virus se pasa a través de la leche materna, por lo que no hay ninguna contraindicación y como especialistas sigan promoviendo esta práctica debido a que "es el alimento más importante del ser humano en los primeros dos años de vida, los primeros seis meses es vital, es el vínculo que se cree con la madre, evita alergias, es un crecimiento mejor para el bebé con mayor desarrollo en todas sus actividades, es la primera vacuna que el bebé recibe".
Debido a que el Covid-19 es una enfermedad muy nueva "se le pide a las madres que tome todas las medidas pero no hay estudios que valide que está contraindicado el amamantar. La que está embarazada tiene que protegerse pero la otra cosa que se puede y se está recomendando es la extracción de la leche, si tenemos miedo, el Covid-19 es leve, puede extraer la leche y dársela al bebé".
