Kevin Isaac Molina Pichardo tiene ocho años de edad, es amante del fútbol y luchó no solo para ser parte de la Academia Chivas FC de Estelí, sino también contra un retinoblastoma, es decir, un cáncer en su ojo derecho.
Kevin es quien llega con disciplina a sus prácticas y al campo de juego del Chalet, donde tiene como rol principal cada sábado impedir que los adversarios se acerquen a portería y marquen goles.
El sobrevivió a una batalla que en un momento parecía perdida contra un cáncer, que llegó cuando apenas tenía un año y que cambió su vida y la de su familia para siempre.
Dania Samaris Pichardo es su madre y nunca perdió la fe en que su hijo estaría bien, mientras su padre luchaba trabajando para conseguir algo de dinero que ayudara a la recuperación del infante.
Es un cáncer de ojo que lo llevó a una intervención quirúrgica hasta el punto de tener que usar una prótesis, algo que no asimilaba en los primeros días, pero con el tiempo se dio cuenta del valor que tenía como ser humano. El de luchar por sus propios sueños y proyectos de vida.
La cirugía no es a lo único a lo que se enfrentó, sino también a las quimioterapias, que en su momento lo hicieron botar el pelo, pero el amor de padres y la fe en Dios más la ayuda médica, le sacaban fuerzas para enfrentar ese mal.
Este es uno de los tantos canceres silenciosos que pueden arrebatar la vida en segundos si los padres no están atentos a sus hijos, pues Dania Samaris mientras estuvo internada en el hospital vio con muchos niños y compañeros de sala se rendían ante la muerte.
Junto a su mamá se muestran contentos. Foto: Famnuel Úbeda/Radio ABC StereoKevin Isaac es el hijo mayor de Dania, nació sin ningún problema de salud, sino que fue hasta el 18 de octubre del año 2013, después de haber ingresado por una neumonía al Hospital San Juan de Dios que los médicos notaron que los ojos del niño tenían un color rojo fuera de lo normal, algo que encendió las alarmas y los llevó a su traslado a un hospital capitalino. Al mismo tiempo salían de los ojos del niño lágrimas de dolor, mientras su madre se llenaba de angustia y desesperación.
Ahora este sobreviviente del cáncer, no solo lucha por su vida, sino conquistar sus sueños y entre ellos está el de llegar a formar parte del equipo de fútbol más famosos de la zona norte de Nicaragua: Real Estelí, además de llegar a ser parte de la selección nacional e ir a torneos internacionales, sin olvidar sus estudios, pues anhela ser médico pediatra.
Kevin Isaac Molina ahora quiere gritar al mundo que es un sobreviviente del cáncer de ojos y hoy canta y cuenta los goles que han metido como Academia Chivas FC de Estelí en categoría mosquito. También las oportunidades que le ha dado la vida.
