Solo parte de la osamenta de un toro, valorado en unos 30 mil córdobas, fue lo que encontraron sus propietarios, luego que elementos desconocidos incursionaron a la finca y sacrifican el animal, aprovechando horas estratégicas de la noche o madrugada.
El hecho se registró en la finca El Aguacate, propiedad de Doroteo Castellón, en la comunidad Santa Rosa, a varios kilómetros al este del casco urbano del municipio de Condega, departamento de Estelí, a orillas de la carretera que conduce hacia el municipio de San Sebastián de Yalí, Jinotega.
El toro, según los perjudicados, estaba recién vacunado, por lo que quienes consumieron su carne corren el riesgo de intoxicarse o sufrir otro tipo de afectaciones de salud debido a la reacción del medicamento.
Las víctimas, quienes ya habrían interpuesto la denuncia ante la policía con el propósito de dar con los autores del caso de abigeato, se enteraron de lo sucedido en el momento en que realizaban un recorrido por el potrero en busca del semental.
Los dueños lamentan esta situación, ya que además de afectar de forma directa su economía, los delincuentes les impiden seguir trabajando con tranquilidad, por lo que tienen que verse en la obligación de implementar nuevas medidas de seguridad.
Cabe destacar que en diferentes municipios de Estelí, han sido varios los ganaderos o pequeños productores afectados con el robo o destace de sus animales, causando graves pérdidas económicas.