En una audiencia especial realizada ayer martes en la sala de juicio del Complejo Judicial de Ocotal, Nueva Segovia, Roberto Carlos Maldonado Ávila admitió los hechos señalados en la acusación del Ministerio Público por el asesinato de Ludim Dodanim Reynosa Ruiz.
La acusación indica que el 23 de junio de este año, en la vía pública cerca del comedor infantil de la comunidad Nuevo Amanecer, en Jalapa, Nueva Segovia, el acusado tomó una piedra del suelo y, con la intención de acabar con la vida de la víctima, la golpeó en el lado izquierdo de la cabeza.
El documento también señala que antes del crimen hubo un cruce de palabras entre la víctima y el victimario. "Te avisé lo que iba a suceder", dijo el acusado antes de matar al segoviano, para posteriormente huir del lugar.
Al Juzgado de Distrito Penal de Juicio, presidido por la doctora Verónica Fiallos Moncada, se presentaron Junior Ortez Marenco, en representación del Ministerio Público, y Howard Wilfredo Joya Díaz, defensor público, quien informó que su cliente decidió aceptar los cargos.
Antes de dar por concluido el caso, la jueza Verónica Fiallos verificó que la admisión del acusado no había sido influenciada por amenazas o coerción, garantizando que fue voluntaria, espontánea y veraz.
En la etapa de debate de pena, el fiscal Junior Ortez Marenco solicitó una pena de 12 años y 6 meses de prisión, además de que se mantenga la medida cautelar de prisión preventiva. Por su parte, el defensor técnico Howard Wilfredo Joya consideró que su defendido reúne las atenuantes para solicitar la pena mínima de 10 años de prisión. La sentencia será leída en los próximos días.
