Samir Solano Castro, de 12 años y estudiante de quinto grado en la escuela especial de la ciudad de Estelí, fue víctima de discriminación el pasado sábado 31 de agosto mientras intentaba tomar un taxi para participar en el tercer desfile patrio de la ciudad.
Samir Solano Castro presenta una discapacidad físico-motora, por lo que usa silla de ruedas.
Mariela Flores, su tutora principal, relató que esperaron por más de una hora, haciéndole paradas a taxistas para que los llevaran al lugar de la concentración de estudiantes, donde él destaca en excelencia académica.
Sin embargo, varios conductores de taxi se negaron a prestar el servicio al ver que Samir usaba silla de ruedas.
Mariela dijo que a cada conductor de taxi que se detenía, le explicaba que la silla de ruedas era desmontable, pero aun así se negaron, lo que ella considera un acto de discriminación.
Mariela pide a las autoridades municipales, en particular a la Secretaría de Transporte, que se promueva entre los propietarios y conductores de taxi mayor cortesía y empatía hacia las personas con discapacidad, pues merecen un trato digno.
Finalmente, Mariela y Samir lograron llegar al desfile, sin embargo, la situación se repitió al finalizar el evento, cuando nuevamente ningún taxista accedía a llevarlos de regreso a casa.