La prolongación del verano este año ha comenzado a tener impacto entre ganaderos y productores de hortalizas en Estelí.
Según reportes de ganaderos, las reservas de pasto, principal fuente de alimentación para el ganado, se están agotando. Mientras tanto, los agricultores, además de las condiciones climáticas, resienten los bajos precios que están recibiendo por hortalizas.
Salvador Castillo Montenegro, ganadero de Estelí, explicó que esta situación obliga a recurrir a suplementos alimenticios y al uso de paca de maní para mantener a los animales en condiciones saludables y evitar que caigan en estados de desnutrición o deshidratación.
Salvador Castillo Montenegro agregó que como ganaderos esperan que en las próximas semanas comiencen las lluvias para poder recuperar los pastizales y estabilizar la situación.
“Estamos a la espera de la lluvia. Creo que no debemos preocuparnos, nosotros sabemos que ya estamos en la época. Nosotros como productores siempre tenemos previstas estas situaciones”, comentó Castillo Moreno.
Por su parte, Ariel Irías, productor en Miraflor, Estelí, indicó que el retraso de las lluvias y experimentar temperaturas elevadas ha provocado una disminución en el nivel de los reservorios de agua, recurso necesario para el riego de los cultivos durante el verano.
Ariel Irías dijo que a este panorama se suma el problema de los bajos precios. Esta situación ha generado descontento e incertidumbre en las familias rurales, que dependen en gran medida de la agricultura para su sustento.