José Gabriel Espinoza, de 25 años de edad, originario de El Rodeo de la comunidad El Bramadero, en el municipio esteliano de Condega, ha sufrido durante toda su vida discapacidades que le impiden hablar y le dificultan caminar, además presenta algunos problemas psicológicos. Él vive junto a su madre en situación de pobreza, lo cual no les permite conseguir mejor tratamiento a sus complicaciones.
Doña Socorro Salinas, de aproximadamente 50 años de edad, es la mamá de José Gabriel, ella lava ropa ajena para proveerle de lo necesario a su hijo, pero asegura que ahora se le hace más difícil laborar y conseguir el dinero que se requiere para las necesidades de su hijo y el hogar.
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José Gabriel necesita una cama porque la que tiene se encuentra en muy malas condiciones y la mayor parte del tiempo se ve obligado a permanecer acostado. También requiere de una silla de ruedas para poder movilizarse, además de pañales desechables, vitaminas y ropa.
Su mamá, doña Socorro Salinas, decidió apelar a la solidaridad de la población en busca de ayuda para las cosas que necesita su hijo ya que entre los demás miembros de su familia el apoyo que recibe es casi nulo.
José Gabriel y doña Socorro habitan en una humilde vivienda a unos 30 kilómetros del casco urbano de Condega. Su dirección es: de la iglesia católica de la localidad 300 metros hacia el este.
También le pueden llamar a través del número de su vecino que responde al nombre de Marlon, ya que ellos no tienen celular propio, dicho contacto es el: 8372-6833.