En medio del dolor por su partida de este mundo, familiares de un niño de 5 años que murió ahogado en una represa que contiene agua para ganado, en la comunidad El Barro, del municipio de Condega, departamento de Estelí, le dieron cristiana sepultura.
El lamentable caso se registró la tarde del jueves 29 de octubre, cuando el infante en compañía de otro menor de edad que era su primo hermano, después de jugar a solas, se introdujeron en una represa ubicada cerca de su vivienda.
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El niño que sobrevivió, al observar que su compañerito no salía del agua, habría tratado de auxiliarlo y acto seguido también dio aviso a los padres de la víctima, pero desafortunadamente cuando llegaron por su rescate, el menor ya estaba sin signos vitales.
Los agentes de la policía junto al médico forense llegaron el día siguiente al lugar y según fuentes extraoficiales, la causa de la muerte del infante fue determinada como asfixia por sumersión. La comunidad El Barro está situada a uno 8 kilómetros del casco urbano de Condega, donde lamentan la pérdida del pequeño.
