NOTICIA

Local

Teresa Gutiérrez: "Salir de las adicciones es posible"

Teresa Gutierrez es una esteliana que recorría las calles sumida en el vicio pero ahora está decidida a dejar las adicciones y cambiar su vida para siempre. Detrás de sus luchas, hay una historia de una mujer que sueña ayudar a otras personas y poder recuperar el cariño de su hijo de diez años.

Teresa ingresó al centro hace un mes. Foto: Alba Nubia Lira/Radio ABC Stereo
Teresa ingresó al centro hace un mes. Foto: Alba Nubia Lira/Radio ABC Stereo

Periodista Alba Nubia Lira
15-Junio-2021
Estelí-Nicaragua

Unas tres millones de muertes se registran cada año en el mundo a causa de la adicción al alcohol, más de 8 millones de personas fallecen a causa del consumo de tabaco y más de 580 mil pierden la vida producto de la drogadicción.

Las adicciones son un factor que además desgasta en gran medida la calidad de vida de quienes las padecen al igual que a las personas que rodean al adicto o adicta.

De la normalidad a las adicciones

Teresa Gutiérrez es una esteliana de 38 años de edad, quien consumió alcohol por primera vez cuando aún era estudiante de secundaria, poco a poco lo que comenzó como una travesura se convirtió en un vicio, cuyos efectos le hacían deambular en las calles, apedrear a personas y negocios, además se desnudaba en la vía pública.

"Era un sofoque por estar en la calle, no quería estar en la casa, tenía ansiedad de fumar, me daba insomnio y cólera, le tiraba piedras a la gente, me llamaban loca pero lo que tenía era un descontrol por los vicios, no descansaba, la gente en la calle me decían 'chucky' y 'loca', yo me alteraba, eso me daba cólera, al principio caminaba sola y trataba de conseguir dinero sola para mantener mi vicio", relata Teresa a Noticias ABC.

La esteliana está decidida a cambiar en favor de su vida. Foto: Alba Nubia Lira/Radio ABC Stereo

Antes de volverse dependiente principalmente del alcohol y el cigarrillo, aunque ocasionalmente también consumía drogas, Teresa era una estudiante que anhelaba ser enfermera, trabajó en restaurantes reconocidos de esta ciudad y era líder de jóvenes brindando enseñanzas en una iglesia evangélica.

"Antes dormía normal, iba a clases, después hacía el oficio, fui líder de una iglesia y la dejé por el vicio, mis hermanos trataban de ayudarme y yo recaía, así fue que salí embarazada, tuve al niño que ya tiene 10 años, trabajé, le ayudé en lo que pude pero después recaía", cuenta la esteliana que en recuperación.

"Después salí embarazada por segunda vez, tuve una niña de un policía que no valía nada, él me embarazó y me enseñó a consumir drogas, tuve a la niña y me la quitó el Ministerio de la Familia porqué no había quien me ayudara con la niña, entonces ella fue adoptada", compartió Teresa con Noticias ABC.

Camino a la rehabilitación

Afortunadamente la rehabilitación es posible, en este momento Teresa tiene un mes recibiendo terapia en el Centro de Rehabilitación Física y Mental Don Divino, ubicado en la comunidad La Garnacha Estelí, gracias a las gestiones realizadas por Nataniel Tercero, director de este sitio, para lograr acogerla y becarla.

Ahora Teresa tiene firmes propósitos de cambio de vida, entre los que incluso se encuentran convertirse en terapeuta para ayudar a otros. "Me gustaría recuperar el cariño de mi hijo, el cariño de mis hermanos y buscar un trabajo, ahora ya no me da ansiedad por querer fumar o beber, es hora de que piense mejor las cosas y siente cabeza", sostiene Teresa.

Nataniel Tercero, director del Centro de Rehabilitación Don Divino, dijo que en este sitio se encuentran internadas 160 personas que luchan por superar sus adicciones, cuyas terapias duran aproximadamente un año.

El Centro Don Divino becó a Teresa en su proceso de rehabilitación. Foto: Alba Nubia Lira/Radio ABC Stereo

"En el trayecto de dos años que llevamos sirviendo, nosotros hemos tratado a más de mil pacientes, no es un trabajo fácil pero sí satisfactorio, hemos tenido historias de éxito", expresa Tercero.  

Por su parte, la psicóloga Zayda Treminio Rizo, indica que un elemento clave para salir de las adicciones es "crecer emocionalmente", lo cual es un proceso difícil que requiere fuerza de voluntad para que la persona logre mejorar así su vida.

"Reconocernos como seres humanos, reconocer nuestra valía, reconocernos como seres espirituales, pero sobretodo, conectar nuestros pensamientos y emociones con nuestro cuerpo para activar nuestro sentido de autocuido y autorregulación, reconocer que tenemos un problema y activar una red de apoyo con la que sabemos que podemos contar. Es como volver a nacer a la vida", explica la especialista. 


Comparte esta noticia